Créditos y entrevista

Créditos
La investigación y la realización de esta web ha sido realizado por Gabriel Bou Talamonte, nieto de Gabriel Bau.
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Entrevista
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25-06-2014

Gabriel Bau i Fortanete (1892-1944) fue un gran jugador del Barça de la década de los años diez del pasado siglo XX, es decir del Barça de la época del Camp del Carrer Indústria. Hace justo 100 años, él, junto a otros grandes mitos azulgranas como Paulino Alcántara, empezaron a hacer grande al FC Barcelona.
Gabriel Bau tuvo cuatro hijos: dos hombres y dos mujeres. De sus cuatro hijos, permanece vivo su hijo pequeño, con 80 años. El hijo de éste y nieto del futbolista, Gabriel Bou, ha sido entrevistado por Revista El Català.
Cabe comentar que el cambio del apellido Bau por Bou que se observa en la entrevista se debe a un error burocrático cometido después de la Guerra Civil española que ha permanecido hasta hoy.

-¿Cuáles fueron los orígenes de Gabriel Bau?
Los orígenes de mi abuelo están fuera de Catalunya. Su madre vino de un pueblo de Castellón que se llamaba Zucaina. Dicen que vino andando a Barcelona para servir.
-¿Dónde nació Gabriel Bau?
Mi abuelo nació en la calle Guilleries, número 30, del barrio de Gràcia de Barcelona, al lado de la plaza del Diamant. Tuvo dos hermanos. El segundo hermano también jugó al fútbol, aunque no destacó tanto como mi abuelo.
-¿De qué trabajó su abuelo, más allá del fútbol?
Mi abuelo conoció a mi abuela y, cuando se casaron, ambos montaron una fundición (de cobre, bronce, estaño…) en la calle Castella con Pere IV, en el Poble Nou. Él era fundidor; hacía piezas de alumini, de bronze, de cobre… De hecho, en la época de la Guerra Civil, tuvo que esconder mucho material porque se lo podían requisar. Trabajaba y vivía en Poble Nou. Y murió en el Poble Nou, aunque no está enterrado allí, sino en el Cementerio de Les Corts, donde enterraban a muchos jugadores del Barça.
-Por cierto, Gabriel Bau murió muy joven. ¿De qué murió?
Murió con 52 años. Él pasaba un día por el Paral·lel, que era donde estaba la fiesta en Barcelona a principios de siglo XX. Por allí, había unos trileros y con ellos un marinero que se estaba dejando los cuartos en los trileros. En aquel momento pasó mi abuelo y le dijo: “¡Chaval, vete de aquí que te van a sacar hasta la camisa!” Un individuo que trabajaba con los trileros y que se dedicaba a vigilar el entorno hirió a mi abuelo en el brazo con una navaja. Mi abuelo se fue a casa, no le dio importancia a la herida… y se le gangrenó. Esto pasó justo después de la guerra, en el año 1942. Fueron corriendo a buscar penicilina, pero ya era demasiado tarde: la gangrena se le extendió por todo el cuerpo y murió.
-¿Cómo era su abuelo?
Era un hombre muy dado a la gente. Por ejemplo, explicaban que, después de la guerra, él podía salir a la calle con un abrigo y volver sin él porque se lo había regalado a alguien que lo necesitaba.
-Hablemos del futbolista. ¿Siempre le había gustado jugar a fútbol?
Sí. Cuando era pequeño se escapaba por el balcón de la calle Guilleries y saltaba para ir a entrenar. Le gustaba mucho jugar.
Cuando estuvo en el Barça, llegó a ser máximo goleador alguna temporada, por delante de la figura de la época, Paulino Alcántara, con quien jugó varias temporadas y tuvo una muy buena relación.
Precisamente, para ilustrar su relación con Paulino Alcántara os explicaré una anécdota. Durante la década de 1950 aproximadamente, mi tía –hermana de mi padre- fue al médico, a una consulta situada en la calle Pere IV. El doctor al que fue era un tal Doctor Alcántara. Mi tía cayó en la cuenta del apellido del doctor y, cuando ya lo vio, algo moreno de piel, le preguntó: “¿Usted es el Alcántara que jugó en el Barça?” El médico le respondió que sí. Mi tía continuó: “Mi padre jugó con usted”. Alcántara le preguntó: “¿Y cómo se llamaba su padre?”. Ella contestó:“Gabriel Bau”. Entonces él se levantó, la abrazó profundamente emocionado y le dijo: “Su padre fue un gran jugador pero, sobre todo, un gran compañero”.
-Gabriel Bau fue un goleador importante en el Barça de aquella época.
Sí, marcaba muchos goles. Incluso, con el Barça, jugó partidos amistosos en el extranjero. Estuvo en Francia, en Suiza…
-Hemos hablado de su buena relación con Alcántara. ¿Coincidió con el otro mito azulgrana de la época, Josep Samitier?
Sí. Llegaron a coincidir, sí. Pero decía de él que era un chulillo… Cuando Samitier entró en el Barça, mi abuelo ya jugaba los últimos partidos con el equipo.
-Gabriel Bau estuvo en activo como jugador hasta 1924 y después fue entrenador.
Así es. Estuvo activo en los clubs hasta esa fecha, siendo también el capitán de la selección catalana. Le llamaban “el Gran Capitán”. Fue capitán de una de las primeras selecciones catalanas. En aquella época, quizás jugaban uno o dos partidos al año. Y, por cierto, la selección catalana es más antigua que la española. En los últimos años, ya como entrenador, dirigió al Avenç de l’Esport, hoy U.E. Sant Andreu.
-Una vez dejó de entrenar, ¿se desvinculó del fútbol?
Sí. Incluso tampoco hacía mucho caso del fútbol, ni siquiera lo seguía mucho. Le gustaban más los toros. De hecho, mientras estuvo en activo, a él le daba igual jugar en el Badalona o en el Barcelona, lo que quería era jugar a fútbol.
-Y después de su época como jugador y entrenador llegó la Guerra Civil. ¿Cómo le afectó?
Cuando estalló la guerra tenía ya 44 años. La columna de Durruti, por cierto, pasó por la calle Pere IV y mi abuelo vivía al lado de esa calle. Él era de la FAI (Federación Anarquista Ibérica), así que se sumó a la columna y se fue con ellos. Cuando llegaron al frente lo echaron para atrás porque era muy mayor.
Después de la guerra, un día, él estaba jugando una partida de dominó, delante de la fundición. Hablaban de la situación, de la FAI, de los falangistas… Junto a ellos había un “secreta” y los oyó. El caso es que se llevaron a mi abuelo y a Garrobé, que era uno de los estaban allí con él. Garrobé era un jugador de fútbol barcelonés que había jugado en el Valencia. Siempre estaba por la fundición pidiéndole dinero a mi abuela… Estuvieron en la cárcel casi un año.
-El Barça, como entidad, ¿se ha preocupado por la historia de su abuelo como jugador?
No. Incluso llegué a pedir al club información… y no me contestaron nunca. Quien sí que se preocupó mucho fue un hombre, utillero del Sant Andreu. Me dirigí a ese club para consultar sus archivos y él me explicó que se habían quemado todos. Pero me ofreció una lista donde aparecían alineaciones y donde estaba mi abuelo; una lista que había confeccionado él mismo a mano. Salvó todos los datos que pudo.
De donde conseguí la mayor parte de la información que tengo de la época de jugador de mi abuelo, desde el año 1909 al año 1924, es de la hemeroteca de El Mundo Deportivo. Allí salía cada semana. También apareció bastante en una revista que se llamaba Foot-ball.

Gabriel Bou recuerda muy bien la vida de su abuelo en general y su carrera deportiva en especial. El nieto de Gabriel Bau, el magnífico delantero del Barça de los años diez del pasado siglo y el Gran Capitán de la selección catalana, recuerda con precisión todo tipo de detalles de su famoso ancestro. Esta entrevista, al igual que una muy bien documentada web que tiene dedicada a la carrera deportiva de su abuelo (www.gabrielbau.com), son un ejemplo de ello.